El pequeño Adrián Fanegas. es uno de los 35.000
leoneses que sufren una enfermedad rara. Con sólo diez años, ya se ha
sometido a trece operaciones
Con apenas tres meses, la vida del pequeño Adrián Fanegas comenzó a
transcurrir entre quirófanos y la Unidad de Cuidados Intensivos del
Hospital de La Paz en Madrid. Un continuo peregrinar desde la capital
leonesa que hoy, diez años después, se traduce en trece operaciones —la
mayoría de mandíbula, pulmones y orejas—, visitas mensuales a
especialistas y la esperanza de alcanzar un futuro «lo más normal
posible», señala su padre, Alfonso Fanegas.
Como otras 35.000 personas en la provincia de León —el 60% niños—
Adrián padece una Enfermedad Rara, en concreto síndrome de Treacher
Collins, que afecta a 2 de cada 100.000 nacimientos. Pese a todas las
complicaciones que conlleva, su día a día es ‘casi’ como el de cualquier
niño de su edad. Va al colegio y sueña con «jugar al fútbol» admite,
aunque de momento se conforma con ver a sus ídolos en la televisión.
Culé confeso, tuvo la oportunidad de fotografiarse no hace mucho con
Jordi Alba, el lateral del Fútbol Club Barcelona.
El Treacher Collins surge por una mutación genética espontánea
durante el embarazo o se transmite de forma hereditaria. Entre los
síntomas que provoca destacan la microtia —pequeña oreja— asimetrías de
los párpados por coloboma, desarrollo incompleto de la mandíbula o
faringe muy estrecha, entre otros. De hecho, hasta hace cuatro años
Adrián sólo podía alimentarse a través de una sonda. «Resulta increíble
su enorme fortaleza para recuperarse de cada operación», destaca su
progenitor, un ex Guardia Civil que a raíz de la enfermedad de su hijo
tuvo que pedir la baja por depresión. Pese a que tanto él como su mujer
no pierden la esperanza, asegura que aceptar algo así no es sencillo,
sobre todo cuando las administraciones «no ponen de su parte todo lo que
deberían», critica.
Hasta la fecha las intervenciones quirúrgicas de Adrián han corrido a
cargo del sistema de salud español, pero no así el resto de gastos
indirectos. «Entre viajes, alojamientos y aparatos para que Adrián
mejore llevamos gastados unos 20.000 euros y ya me han presupuestado
otros 18.000 más de cara a futuras operaciones». Sabe que no puede
aspirar a mucho más, pero al menos pide «una ayuda en condiciones para
los desplazamientos» a otras ciudades como Oviedo o Madrid, donde acuden
al menos tres meses al mes.
Por su parte, el vicepresidente de Feder (Federación Española de
Enfermedades Raras), Santiago de la Riva, denuncia la falta de
especialistas en los hospitales de España para tratar las enfermedades
raras. «Hay recursos, pero no alguien que coordine todo», subraya.
En España se conocen 5.000 enfermedades raras con una media de
diagnóstico de cinco años. «El apoyo de las instituciones es bastante
deficiente», insiste. Si bien es cierto que las Cortes de Castilla y
León acaban de aprobar una propuesta para crear unidades de diagnóstico
precoz, los problemas surgen cuando hay que derivar a otras comunidades
autónomas. «Antes existían los fondos de cohesión, pero el actual
Gobierno de España se los cargó, dando lugar a ciudadanos de primera y
de segunda». De la Riva cree que el principal problema es la falta de
investigación. «En cinco años se ha reducido hasta un 50% la
financiación al CSIC, provocando que los grandes profesionales se
marchen de España».
Feder celebra hoy el Día Mundial de las Enfermedades Raras con un
acto en el Ayuntamiento de la capital, a las 19.00 horas. Un acto que
contará con la presencia del alcalde, Antonio Silván y el presidente de
la Diputación, Juan Martínez Majo. La federación aglutina a más de 300
asociaciones que recogen 800 patologías diferentes. Se trata de una
jornada de sensibilización y divulgación donde intervendrán el propio de
la Riva —padre de dos hijos con enfermedades raras—, la investigadora
del CIB-CSIC, Luisa Botella Cubells y el padre de Adrián Fanegas, entre
otros.