sábado, 19 de septiembre de 2015

La gran mentira: Mi hij@ va a dejar de entrenar porque necesita centrarse en los estudios.

Creo que la mayoría de entrenadores que estéis leyendo esto os habréis encontrado alguna vez con esta situación, padres que nos dicen: “el niño va a dejar de entrenar porque necesita centrarse en los estudios” (o cualquiera de sus variantes, “porque ha suspendido muchas y necesita más tiempo”, “porque ha bajado su rendimiento académico y le vamos a castigar sin que venga a entrenar” etc). Pues bien, para mí, esto es una de las mayores mentiras que nos podemos encontrar en cuanto al abandono deportivo, y no porque esos padres nos estén engañando a conciencia, sino porque se están auto engañando, en la mayoría de ocasiones, sin saberlo.
Sería interesante tener certeza de cuántos de estos niños que son forzados a abandonar el deporte mejoran su rendimiento académico. No tengo constancia de que haya ningún estudio que aporte datos sobre esto, pero mi propia experiencia y la de muchos compañeros con los que he podido hablar sobre el tema, es que el porcentaje de niños que mejoran sus resultados académicos tras el abandono deportivo es bajísimo.
¿Y si realmente el dejar el deporte parece que no da resultado, porque sigue dándose esta situación? Bajo mi punto de vista, existen dos razones principales con las que se trata de justificar este tipo de situaciones. La primera es utilizar el deporte, o mejor dicho, el dejar de hacer deporte, como castigo. Como bien sabemos, la pasión de muchos niños es el deporte, por tanto, el privarles de aquello que más les gusta es un castigo severo para ellos. La segunda razón es el tiempo, ya que las horas que pasan entrenando, compitiendo etc. podrían pasarlo estudiando o dedicándolo a tareas académicas. Como ya imaginareis, mi opinión es que ninguna de estas razones justifica el abandono del deporte en niños y jóvenes, por lo que de aquí en adelante voy tratar de argumentarlo.
De las dos razones que acabo de nombrar, quizás la del castigo como motivo del abandono sea la que “mejores” resultados puede dar, es decir, probablemente algunos de esos niños, al ser castigados, cambien su conducta y mejoren sus resultados académicos, pero mi pregunta es ¿es el deporte la mejor moneda de cambio? Son de sobra conocidos algunos de los beneficios de la práctica deportiva, tanto a nivel físico como a nivel psicológico, por lo que pienso que sería mucho más conveniente privarles de otras actividades o hábitos que, aun gustándoles, no sean tan beneficiosos para ellos, como por ejemplo, los videojuegos, tablets, móviles, TV, alimentos poco saludables…
Por otro lado, tenemos el tiempo que el deporte “roba” a los estudios. Es evidente que las horas que los chic@s están en practicando deporte no pueden dedicarlo a sus actividades académicas pero, a pesar del tiempo que están en los centros educativos y la cantidad de actividades que tienen para casa (que sería otro tema a discutir) ¿realmente no tienen tiempo para practicar deporte y sacar los estudios adelante? En mi opinión, tienen tiempo para todo, pero lo que hacemos es buscar la opción cómoda, en lugar de fomentar valores como el compromiso, la disciplina o la responsabilidad, les modificamos el entorno, en este caso quitándoles una actividad que sabemos beneficiosa, y que de esa forma lo tengan más fácil y no salgan de su zona de confort. Por tanto, además de desaprovechar los beneficios físicos de la práctica deportiva, estamos desaprovechando el potencial que tiene el deporte para el desarrollo de unos valores importantísimos para su desarrollo personal.
Con todo lo dicho hasta ahora creo que ya sería suficiente para justificar la importancia de no abandonar el deporte, pero ¿os imagináis que además de todo lo que hemos hablado, pudiésemos decir a los padres que si los niñ@s hacen deporte van a tener mejor memoria y van a aprender más rápido? Pues tengo buenas noticias, SÍ, se lo podemos decir. Hace no mucho tiempo, un grupo de neurocientíficos de una de las universidades más prestigiosas del mundo (UCLA) pudieron demostrar algo que ya se intuía desde la antigüedad (recordemos la frase “Mens sana in corpore sano” que se escribió en el siglo I d.C), el ejercicio físico tiene un impacto positivo sobre nuestro cerebro. Estos científicos demuestran que la práctica de ejercicio físico aeróbico, coordinativo y que implique toma de decisiones (el tenis, es un claro ejemplo) favorece la aparición en el cerebro de una proteína llamada BDNF que está relacionada directamente con los procesos de memoria y aprendizaje. Por tanto, la práctica de este tipo de actividad física va a mejorar dichos procesos cognitivos, y de ahí que podamos decir a los padres que si sus hijos hacen deporte van a tener mejor memoria y van a aprender más rápido.
Por otro lado, en la Universidad de Illinois también han realizado estudios que relacionan la práctica de actividad física en niños, con su actividad cerebral. La imagen que aparece más abajo, perteneciente a uno de estos estudios, muestra la actividad cerebral de un niño físicamente activo, frente a un niño sedentario, durante una actividad cognitiva relacionada con la atención y la memoria. El color rojo representa una mayor actividad cerebral y el azul una menor actividad cerebral. En este caso, una imagen vale más que mil palabras.
actividad cerebral
Creo que tanto padres como entrenadores, tenemos suficientes razones como para dar al deporte la importancia que tiene, siendo un error el quitar horas de práctica deportiva con la excusa de que los chic@s tienen que estudiar más. Ayudémosles a que aprendan a organizarse, a que se comprometan con el deporte que han decidido practicar, a que sean responsables y sepan planificarse, y no les forcemos a escoger el que parece el camino fácil. Este camino les va a privar de desarrollar una serie de valores importantísimos, va a ser un camino mucho más tortuoso y seguramente no les va a llevar al destino que pretendemos.
A continuación, os dejo un capítulo del programa Redes que emitía La 2 de TVE titulado “Deporte para un cerebro más sano” donde hablan del ejercicio como estimulador del aprendizaje y de la memoria.

http://www.rtve.es/alacarta/videos/redes/redes-20-deporte-para-cerebro-mas-sano-14-11-10/930711/

¿Podrías usar un Dispositivo de Ayuda Auditiva (ALD) cuando estás viendo la TV?

¿Podrías usar un Dispositivo de Ayuda Auditiva (ALD) cuando estás viendo la TV?

Foto de MED-EL España.
¿Podrías usar un Dispositivo de Ayuda Auditiva (ALD) cuando estás viendo la TV? Al utilizar un ALD consigues estar más cerca porque envía el sonido directamente... al procesador de audio.
Aquí te enseñamos algunos de los diferentes ALDs que puedes usar con la TV:
- Lazo inductivo: Puedes usar un lazo inductivo tanto con un transmisor de audio (a veces viene incluido en el lazo inductivo) que puede conectarse al TV, como con Bluetooth (para Bluetooth que permita TVs). Simplemente enciende la telebobina de tu procesador de audio para que se conecte al lazo inductivo.
- Auriculares: Puedes enchufar un par de auriculares-de-oreja normal directamente en la TV o, a veces, se pueden conectar por Bluetooth. Pop los auriculares sobre tu procesador y ¡ya estás listo para oír!
- Sistemas FM: Algunos sistemas FM tienen transmisores que pueden enchufarse a la TV, los cuales crean una conexión inalámbrica que te permite moverte mientras todavía estás escuchando. Simplemente usa un adaptador 3-pin FM y tu portabaterías FM y podrás estar conectado.
- Bucles de inducción: Los bucles de inducción pueden instalarse en un salón de tal modo que puedes usar la función de telebobina de tu procesador de audio para conectarte inalámbricamente a tu TV.
- Siemens miniTek: Si tienes SAMBA, puede conectarse de forma inalámbrica con el miniTek para darte acceso a los ALDs como Bluetooth, bucles de inducción, sistemas FM y más.

UNA WEB EN LENGUA DE SIGNOS ESPAÑOLA ENSEÑA MATEMÁTICAS A NIÑOS SORDOS

La Fundación CNSE para la Supresión de las Barreras de Comunicación ha creado, con el apoyo del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y de la Fundación ONCE, dos páginas web bilingües en lengua de signos española y castellano dirigidas a la práctica docente con alumnado sordo.
Por un lado, la web ‘Matemáticas Visuales’ ('www.fundacioncnse.org/educa/matematicas'), está orientada a alumnado del segundo y tercer ciclo de Primaria con el objetivo de facilitar el aprendizaje y la resolución de operaciones y problemas matemáticos con distintos grados de dificultad.
Otra de las páginas es ‘Mi Blog paso a paso’ ('www.fundacioncnse.org/educa/miblog'), que enseña a niños de Primaria y Secundaria a crear y gestionar su propio blog personal y destaca por contar con un formato eminentemente intuitivo y visual para fomentar su creatividad.
El número de visitas contabilizado en el último mes (del 18 de agosto al 17 de septiembre) supera la cifra de 1.900 y 800, respectivamente.

Para transportar un bebé

Para transportar un bebé

Para transportar un bebé de forma segura

Consejos para transportar un bebé: Cuándo usar y cómo hacerlo de forma segura el capazo, el Grupo 0, el Carrito, la Mochila, el Fular Portabebé.

Hoy en día, uno de los gastos más importantes que los padres afrontan antes del nacimiento de su hijo es el “Kit de transporte”. Los modelos más habituales son un armazón con ruedas al que se puede anclar 3 tipos diferentes de contenedor:
El Capazo. Es una cuna portátil. Pensado para que el niño sea transportado tumbado.
El Grupo 0. Prima la seguridad en la sujeción y la interacción del niño con el entorno.
La Silla de Paseo. Para niños más grandes que no caben ya en los anteriores. Permite que se recline como el Capazo o se incorpore como el Grupo 0.

El Grupo 0

Son estas silletas balancín que van preparadas también para usarse como silla de seguridad para el coche en las que el bebé queda sentado como envuelto por la silla.
Tiene varias ventajas:
– Respecto al capazo, para el trasporte en el coche es más seguro, ya que en el Grupo 0 tienen mejor sujeción. Han mejorado los capazos y ya los hay con anclaje de 5 puntos que son casi tan seguros como el Grupo 0.
– En la casa, para aquellos ratos que el bebé está despierto (mientras duerme, tumbado es preferible), es mejor el Grupo 0 porque en el capazo el niño está todo el tiempo mirando hacia arriba. Y el techo no es de lo más entretenido de este mundo. Sin embargo en el Grupo 0 está incorporado y puede ver todo el movimiento que hay a su alrededor con lo que en muchas ocasiones basta para entretenerlos y favorece respecto al capazo el desarrollo neurológico del bebé (aunque para eso hay opciones mejores).
– Se estimula la coordinación entre manos y ojos, que es uno de los pasos fundamentales para el desarrollo de las habilidades manuales. En el capazo y tumbado boca arriba, el bebé no tiene fuerza para mantener los brazos levantados, por lo que quedan a los lados de la cabeza y el bebé no ve sus manos. Cuando está sentado en el Grupo 0, los brazos quedan hacia el centro y las manos quedan en el campo visual del bebé. De ese modo, cuando mueve sus manos de forma involuntaria, lo ve. Y reconocerá antes que es él quien produce los impulsos que mueven las manos, aprendiendo a controlarlas.
En ese caso ¿por qué no sentarlo simplemente en el carro o en una silleta normal?
Los primeros meses de vida no es aconsejable mantener sentados a los bebés mucho rato, porque cargaríamos el peso del cuerpo sobre la parte baja de la espalda cuando todavía tienen poco tono en los músculos, lo que hace que se adopten posturas forzadas. El respaldo del Grupo 0, sin embargo no es recto, forma un arco. Esta forma hace que el peso de la espalda se distribuya gradualmente con lo que la protege.
El principal problema del Grupo 0 a mi modo de ver es el mismo que tiene el capazo y es lo poco que dura.
Generalmente a partir de los 4-6 meses el bebé ya no cabe. Algunos incluso antes.

La Silla de paseo

Se usa más reclinada cuanto menor sea el bebé.
A la hora de comprarla pensad si vais a usarla mucho:
  1. Que no sea frágil. Pero al mismo tiempo que sea ligera. Hoy día estas dos cosas suelen equivaler a armazón de aluminio.
  2. Que se pueda dirigir bien con una sola mano.
  3. Y que pueda plegarse y extenderse con facilidad y sin tener que aprenderse un manual de instrucciones mayor que el de un avión de combate.
En cuanto a las ruedas:
  1. Si el uso es fundamentalmente en terreno llano con aceras amplias, pasos de peatones con acera rebajada y va a entrar y salir mucho del coche, 3 ruedas finas y que se pliegue con facilidad ocupando poco espacio en el maletero.
  2. Si el terreno es muy irregular (pueblos o casco antiguo con aceras estrechas y con obstáculos), es más estable con cuatro ruedas y éstas más gruesas para que amortigüen un poco.

Mochila y Fular portabebés

Para aquellos que defienden La Crianza Natural, lo anteriormente descrito puede no ser necesario, ya que esta opción defiende el contacto directo y continuo del bebé con personas que lo transporten sin romper esa relación. Para facilitar ese transporte se han usado en muchas culturas formas diferentes, como el Fular portabebés o una versión diferente de la misma idea, la Mochila portabebés. Como opción que favorezca el desarrollo neurológico del bebé el porteo (llevar al bebé en brazos con mochila o fular) es la elección superior.
Si escogemos una mochila es importante que sea ergonómica. Esto significa que mantenga las piernas abiertas abrazando a quien lo lleva y con la espalda arqueada hacia el porteador:
  • Si una mochila deja las piernas colgando es malo para las caderas, ya que favorece que las piernas se separen de la cadera (luxación).
  • Si una mochila mantiene al niño en una postura en la que la cabeza cae hacia atrás alejándole de quien le lleva favorece la hipertonía dorsal que es origen de algunos problemas de desarrollo.
Si lo que usas es un fular, para que sea seguro es importante que la cabeza del bebé quede siempre visible.
Pero también existen opciones mixtas, que es lo que más hace al final casi todo el mundo en las que a veces usan sistemas de transporte donde el bebé va separado del cuidador y a veces es llevado en brazos con o sin mochila o fular.

Silla para el coche

Para los primeros meses sirve el Grupo 0, a partir de ahí hay que usar sillas específicas según la edad. Son los grupos 1, 2 y 3. Los hay que permiten adaptarse en cierto margen (grupos 0-1, 1-2-3) dependiendo del fabricante.
Uséis la que uséis, nunca dejéis que el niño vaya en el coche sin sujeción. En los accidentes de tráfico, cuando en un coche va un niño suelto, suele ser el que se lleva la peor parte, pese a que va en el asiento de atrás. La mayoría de las veces por salir despedido.
En un coche un niño no puede ir seguro simplemente en brazos. En una colisión la inercia multiplica hasta tal punto el peso que ni la mejor madre del mundo podría evitar que su hijo saliera despedido de sus brazos. Por desgracia en mi experiencia he conocido accidentes en el que el único fallecido fue el bebé por no tener medios de sujeción adecuados.
Si llora y no queréis que lo haga, haced paradas frecuentes en las que saquéis al niño de su silla y le déis de comer, juguéis un rato con él… Pero no lo saques para darle el pecho, acunarlo o cambiarle un pañal en marcha, por favor.

7 cosas que solo entenderás si te has criado en una familia numerosa

7 cosas que solo entenderás si te has criado en una familia numerosa

Crecer rodeado de hermanos, tíos abuelos y primos imprime carácter


Ni en ideologías, ni en razas, ni en religiones: el mundo se divide entre los que en Navidades dicen "este año nos juntamos todos, a ver cómo hacemos para caber los cinco" y los que contestan "pues nosotros vamos a ser pocos, solo vamos a necesitar tres mesas y la de los niños". Porque nada marca más que criarte en una familia llena de hermanos, tíos abuelos y primos, cuando la palabra "primo" significa "alguien que te encuentras en todas las comuniones desde 1987 pero no sabes exactamente qué grado de parentesco tenéis".
1. La familia no va solo en la sangre: como en los clanes mafiosos, sabes que familia no es "alguien que comparte tus genes" sino "persona que se sienta a la paella los domingos". Entran en esta definición, entre otros: mejores amigos del instituto, exnovios a los que se les ha cogido cariño, compañeros de la mili de tu padre, el cuñado del cuñado del cuñado que es muy simpático, y la tía Angelines, que nadie sabe de quién es tía pero que es una pieza fundamental porque es la única que se acuerda de todos los cumpleaños.
2. El reciclaje se lleva hasta el límite: en una familia numerosa "heredar" no significa ser propietario de una mansión en la campiña inglesa, sino estrenar curso con los libros ya subrayados (el equivalente escolar del spoiler) y pantalones tan gastados que llevan rodilleras en las rodilleras. Sabes que has pasado a ser adulto el día en que te compran tu propia ropa interior.
3. La privacidad es el tesoro más preciado: está muy bien tener siempre a mano algún primo, hermano o vecino adoptado con quien jugar, pero cuando llega la pubertad y tu habitación se llama "México D. F." por la cantidad de gente que vive en ella, poder quedarse a solas aunque sea un rato es un lujo impagable.
4. Tenéis vuestra propia mitología: cuanto más numerosa es una familia, más secretos y leyendas alberga. Conforme creces, vas descubriendo que tu tío favorito es en realidad el hijo del peluquero de tu abuelo y empiezas a sospechar por qué tu primo Ndalu mide dos metros y su piel es azabache. Al fin y al cabo, el panteón de los dioses griegos fue la primera familia numerosa.
5. Las reglas de los juegos son para los demás: lo primero que haces en Navidades al abrir los regalos es tirar las instrucciones. ¿Qué sentido tiene un juego de 1 a 4 jugadores si solo con los hermanos podríais completar la plantilla del Barça? Así que cuando sales de tu círculo familiar y vas a otras casas, siempre tienes que pedir que te expliquen las normas del parchís porque en tu familia "jugamos con otras reglas. ¿Dónde tenéis aquí los dardos de tirada doble?". 
6. Aprendes que la infancia no es algo tan especial: ser el pequeño de muchos tiene ventajas, como que estén hartos de ver crecer a gente y básicamente te dejen en paz, pero también algún problema de documentación. Toda tu infancia ocupa dos hojas en el álbum de fotos familiar, a compartir con las del perro, y "casualmente" hay un vacío de cuatro años que coincide con tu pubertad: visto un adolescente, vistos todos.
7. La fama de tu familia te precede: tu apellido te va a presentar al mundo, y tanto para lo bueno como para lo malo tienes poco que hacer. Como a los Lannister. Como a los Borgia. Como cuando tus profesores leen tu apellido y te dicen que seguro que eres "un estudiante modélico como Alfonso" o "una fuente de problemas como Chusqui", según el hermano que les haya tocado años atrás. Y no gastes tiempo intentando cambiar sus prejuicios: tus apellidos pesan más que todo lo que puedas hacer como individuo.
Prueba de que el chico de Boyhood no era de familia numerosa: tiene una foto por año

¿Eres zurdo, diestro o ambidiestro... del cerebro?

¿Eres zurdo, diestro o ambidiestro... del cerebro?

En los años que llevo trabajando con niños y jóvenes (e incluso adultos) con déficit de atención, dislexia e hiperactividad, he aprendido a reconocer el estilo de aprendizaje de las personas que acuden a mí.
Hay varios factores que definen el estilo de aprendizaje de cada persona. Uno de los más importantes es la especialización hemisférica cerebral.
Aquí es donde mi esposo diría ¿y con qué se come eso?
Es más sencillo de lo que parece, una vez entendemos la manera de operar de cada hemisferio del cerebro. Pero vamos al grano: responde este test para ver si tu niño (de entre 5 y 13 años) es hemisférico derecho, izquierdo, o balanceado.
Responde con “sí” o “no” cada pregunta.
Tu hijo…
  • ¿Se mueve mucho?
  • ¿Se le dificulta la escritura?
  • ¿Comenzó a caminar después del 13º mes?
  • ¿Es extremadamente sensible a la crítica?
  • ¿Ha tenido alergias o asma?
  • ¿Es muy bueno con juguetes que se arman, como legos o megablocks?
  • ¿Es bueno armando rompecabezas y resolviendo laberintos?
  • ¿Si le lees un libro dos o tres veces, o ve una película, es capaz de decirte los diálogos casi perfectamente?
  • ¿Es muy importante para tu hijo que le caiga bien a la maestra para que le vaya bien en la escuela?
  • ¿Se distrae fácilmente? ¿Se la pasa “en su propio mundo”?
  • ¿Le cuesta trabajo ser consistente para terminar tareas?
  • ¿Tiende a actuar primero y pensar después?
  • ¿Le tienes que cortar las etiquetas de su ropa? ¿Prefiere usar ropa especialmente suave o bastante usada? ¿Ama su ropa vieja?
  • ¿Se siente abrumado en fiestas ruidosas, lugares con mucha gente, o con ladridos fuertes de perros?
  • ¿Le choca que lo abracen?
  • ¿Necesita que le recuerdes constantemente que haga ciertas cosas?
  • ¿Es extremadamente competitivo y mal perdedor?
  • ¿Tiene buen sentido del humor? ¿Tiene habilidad para chistes y bromas?
  • ¿Es tan perfeccionista, al grado en que prefiere no intentar nuevas cosas para evitar fracasar?
  • ¿Puede recordar con lujo de detalle eventos (vacaciones, cumpleaños…) que sucedieron hace dos o más años?
Y por si quieres checarte qué onda contigo, o tienes adolescentes (13 o más años), contesta (o dale a contestar) estas veinte preguntas:
Tú...
  • ¿Eres mejor recordando caras que nombres?
  • ¿Cuándo tienes un juguete o un mueble para ensamblar, te gusta armarlo sin leer el instructivo?
  • ¿Te llegan mejor las ideas cuando estás sólo y te puedes concentrar, que cuando trabajan en grupo?
  • ¿Usas imágenes para recordar cosas, en lugar de nombres o palabras?
  • ¿Tienes el oído muy agudo (híper perceptivo)?
  • ¿Le quitas las etiquetas a la ropa? ¿Te gusta la ropa suave y ablandada (usadita, pues)? ¿Te molesta la ropa áspera o tiesa?
  • ¿Tiendes a menospreciarte mucho?
  • ¿Cuando te piden que deletrees una palabra, la “ves” en tu mente para poder hacerlo, en lugar de recordar el sonido de cada letra en orden?
  • ¿Cuando estudias una materia, tratas de captar la idea general en lugar de memorizar un montón de datos?
  • ¿Eres bueno para resolver rompecabezas y laberintos?
  • ¿Puedes visualizar mentalmente en tres dimensiones? Por ejemplo: visualiza un cubo, gíralo, ¿lo puedes ver desde cualquier ángulo fácilmente?
  • ¿Te tardaste en crecer, llegar a la pubertad? ¿Fuiste un poco más lento que tus compañeros?
  • ¿Necesitas (o necesitaste) que un maestro te cayera bien para poder pasar bien la materia?
  • ¿Te distraes con facilidad, al punto en que te encuentras ensoñando de día frecuentemente?
  • ¿ Eres perfeccionista al grado que interfiere en que intentes cosas nuevas?
  • ¿Eres ultra competitivo? ¿Odias perder, más que la mayoría de las personas que conoces?
  • ¿Eres bueno para “descifrar” a la gente? ¿Te han comentado que “lees” bien a las personas?
  • ¿Escribes más feo de lo normal?
  • ¿Sabes si te tardaste en caminar, o si te tardaste en adquirir ciertas destrezas psicomotoras cuando eras pequeño?
  • ¿Cuando estás en un lugar nuevo para ti, tiendes a ubicarte fácilmente?
Suma todos los “sí” que respondiste. Mientras más “sÍs” hayas obtenido, más dominancia derecha tienes tú o tu hijo.

           Cantidad de “sís”     Especialización
                     0 a 4                muy izquierda
                     5 a 8                    izquierda
                    9 a 12                 balanceada
                   13 a 16                  derecha
                   17 a 20              muy derecha
Esta no es una prueba científica validada. Sólo es para darte una idea general de tu especialización hemisférica cerebral (o la de tu hijo). A continuación describo de manera general algunas características de acuerdo a la dominancia.

La persona con dominancia izquierda
Si respondiste “sí” a menos de 9 preguntas, eres de este grupo. A “los de izquierda” les encanta hacer listas, son muy lógicos y analíticos, se desempeñan bien en puestos gerenciales y tienden a ser gente confiable de quienes puedes depender. Les va muy bien en la escuela. Son ordenados, no faltan a clases ni al trabajo.
No son tremendamente imaginativos. Les incomodan los cambios de rutina, las ideas innovadoras, y los retos que implican moverse de lo habitual. Cuando piensan pueden visualizar imágenes, pero prefieren funcionar más auditivamente. Tienden a almacenar información mental usando nombres, no tanto imágenes. Les gusta platicar, y son muy buenos para tomar notas. Captan muy bien las reglas gramaticales y de puntuación. Los más “izquierdistas” son muy hábiles aprendiendo idiomas.
Les gusta poner reglas y seguirlas. Tienden a aceptar y apreciar lo que leen y escuchan, más que cuestionarlo o pensar independientemente. Brillan en empleos rutinarios, y les va muy duro cuando surge una crisis que requiere de pensamiento flexible para resolver el problema.
Este es el perfil típico de un maestro de escuela, aunque de ninguna manera todos son así.

La persona con dominancia derecha
Mientras más “sís” hayas respondido, más dominancia derecha tienes. Este hemisferio es intuitivo y azaroso en su manera de procesar información. Está adaptado a almacenar la información usando imágenes o escenas, como en películas. Cuando te piden recordar una persona o un evento, de inmediato llega una imagen. Puedes recordar detalles impresionantes, por la fortaleza de tu memoria visual. Por otro lado, las tareas lingüísticas y/o lógicas te cuestan más trabajo. Algunos pocos pueden hacerlo porque desarrollan procesos visuales muy creativos para resolver problemas muy complejos (ejemplo: Albert Einstein). De cualquier forma, los “derechistas” tienen la delantera en el mundo de las imágenes, y se queda atrás en el de las palabras. Desafortunadamente para ellos, las escuelas de hoy son mundos de palabras.
Muchas veces el niño o joven en la escuela tiene un “retraso” al procesar lo que la maestra explica y convertirlo en imágenes en su mente. Cuando la clase va más rápido que su velocidad de “traducción mental”, se confunde y se desorienta.
Este tipo de persona aprende mejor viendo cómo se hace algo, que leyendo o recibiendo instrucciones.
En lugar de aprender a montar la bicicleta por ensayo y error, observan cómo lo hacen otros hasta que se sienten la confianza de que lo pueden hacer. Por esto aprenden a caminar un poco después de los 13 meses (en general, hay excepciones). Tienden a procesar información de manera holística: captan el todo y lo van descomponiendo en partes.
Los “derechistas” tienen a ser genios creativos. El arte, la música y la resolución de problemas pueden ser habilidades especiales en ellos. Su pensamiento es multidimensional, prefieren dibujar y crear a escribir y hablar. Tienen la habilidad natural de retener imágenes mentalmente por periodos muy largos. Muchos arquitectos, constructores y artistas dicen que crean y “ven” la obra terminada mucho antes de hacerla y terminarla.
Precisamente esta habilidad, si se entrena y aprende a aprovecharla, es la que le puede ayudar a tener éxito, en la escuela y en la vida.

Campaña en Internet en busca de un donante de médula para una niña de diez meses

Campaña en Internet en busca de un donante de médula para una niña de diez meses

Médula Para Todos Asturias ha iniciado una campaña para apoyar el llamamiento

"Cuantos más seamos más posibilidades habrá"

Un joven residente en Oviedo, Iván Vilar, ha realizado esta semana un llamamiento en redes sociales a fin de encontrar un donante de médula para su hija Valeria, de diez meses de edad, y aquejada de leucemia mielomonocitica juvenil. Al parecer, el trasplante es el único tratamiento posible, según informa el padre en su cuenta deFacebook.
Inician una campaña en Internet en busca de un donante de médula para una niña de diez meses
"Así que pido que todas las personas que lean esto si pueden y quieren se hagan donantes de médula y los que no que por lo menos compartan esto para que llegue a toda la gente posible por favor, cuantos más seamos más posibilidades habrá", informa Vilar.
El mensaje ha sido compartido, hasta este sábado, 173.220 veces. Además, el perfil de Médula Para Todos Asturias ha iniciado una campaña solidaria para apoyar el llamamiento. Las personas participantes deben compartir una foto mostrando el mensaje #unamedulaparavaleria.